jueves, 6 de diciembre de 2012

Nace centro público para atender abortos


Un nuevo paso hacia la cristalización de la idea de respeto por los derechos reproductivos de las mujeres dio este jueves Bogotá con la inauguración de un centro especializado en la atención de casos de interrupción voluntaria del embarazo que estén enmarcados en las causales permitidas por la legislación nacional.
Dicho centro fue dado al servicio por el secretario de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, y tendrá su sede en el hospital de Centro Oriente (antiguo hospital El Guavio) bajo la coordinación de Álvaro Cuervo.
La idea de la administración distrital es que allí mismo se brinde atención sobre problemas en materia de salud reproductiva, desde casos de infertilidad hasta asistencia por riesgo prenatal.
El hospital estará equipado para practicar exámenes científicos que permitan establecer si la gestación ocurrió como consecuencia de violación, si se presenta malformación fetal o si hay riesgo para la vida de la madre como consecuencia del embarazo, casos específicos en los que es permitido el aborto en el país.
Medellín planeó un centro similar en 2008: la Clínica de las Mujeres. Sin embargo, la idea se frenó, después de que la alcaldía de Alonso Salazar la incluyera en su plan de desarrollo y le asignara $17.000 millones, debido a la oposición de la Procuraduría.
Julieth Gómez, abogada de la Red Nacional de Mujeres y miembro de la Mesa de Seguimiento al Proyecto Clínica de las Mujeres, en Medellín, recuerda que “el procurador Alejandro Ordóñez, apoyado por el sector conservador, creó una comisión para vigilar el proyecto, en la que participó la doctora Ilva Myriam Hoyos, que terminó obstaculizando la viabilidad de la clínica”.
La lucha por la consagración del derecho al aborto en el país fue un proceso de muchos años y de intentos infructuosos ante el Congreso de la República, hasta que en 2006 la Corte Constitucional declaró su viabilidad cuando se presente alguna de las tres variables antes enunciadas.
Para ese entonces se calculaba que en Colombia se presentaban hasta 400.000 abortos clandestinos al año, generando enormes riesgos para la salud de las gestantes, especialmente por las condiciones antihigiénicas en las que eran atendidas en clínicas de garaje. Según información reportada por las EPS del país, desde el fallo de la Corte hasta 2010 se habían recibido 966 solicitudes legales de aborto: 446 por malformación fetal, 209 por violación y 149 por peligro para la madre. Las EPS no tenían datos sobre los 162 casos restantes.
Tras el fallo de la Corte, la Iglesia católica ratificó su rechazo a la idea y la Procuraduría impulsó la tesis de la objeción de conciencia de los médicos frente a las eventuales solicitudes de aborto. Ahora, Bogotá le da un espaldarazo a las mujeres que necesiten acudir a dicha práctica.



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